Asdrúbal el Bello fundó Cartagena en el año 227 aC. Aunque poco durará la aventura de los cartagineses en esta ciudad del sur de la Hispania, ya que Asdrúbal murió asesinado 6 años después.
Posteriormente, su sucesor en Hispania, su cuñado Aníbal Barca , puso contra las cuerdas a la misma Roma.
En efecto, en el año 207 aC. Aníbal, al mando de un ejército multiétnico formado por más de 30.000 hombres a pie, 15.000 a caballo y 38 elefantes, se propone cruzar los Alpes. Después de cruzar Hispania, la Galia y los Alpes con su ejército de elefantes, se presenta en las afueras de Roma, donde se queda esperando los refuerzos para hacerse con la ciudad. Esta ayuda nunca llegó, ya que su hermano que acudía en su ayuda murió en la batalla de Metauro.
Seguidamente, Cartagena cayó en manos de general romano Publio Cornelio Escipión «el africano». Para convertirse desde ese momento en uno de los puertos de salida de las tropas romanas para llegar a África. Esta llevaban el firme propósito de contraatacar Cartago, capital del imperio cartaginés, para acabar con el sueño de estos de hacerse con la ciudad de Roma.